Vivement Dimanche

Los domingos me deprimen. No importa lo que haga en el día, lo feliz que haya pasado, las minúsculas metas que haya logrado cumplir. Siempre termino a una determinada hora de la noche en una especie de trance depresivo, que me lleva a evocar personas (personajes), situaciones que quizás un viernes me arrancarían una sonrisa pero que en domingo me arrancan una lágrima.

No es nostalgia en domingo. Es melancolía y todo aquello que se produce en ese estado es un zombie de creación. Está mutado, es radioactivo. No sirve, pero hay que desechar. Debo vomitar esas letras ácidas que no me dicen nada, que producen náuseas y que se malogran al contacto del papel.

No se puede remediar. Los domingos son dañinos. En especial cuando son húmedos y con un embriagante olor a tierra mojada. Ese vapor me envuelve, hiede mis pensamientos, pixelea mis fotogramas. Un trance que puede durar diez o quince minutos pero con un cansancio que dura hasta las primeros rayos del adormitado lunes.

Autor: saudade86

Master en Comunicación Audiovisual. Profesor, generador de contenidos, viajero. Apasionado por los idiomas. Saudade Pura.

2 opiniones en “Vivement Dimanche”

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: