En medio de una carretera lluviosa, atravesando de la costa a la selva, mi padre con su poco manejo de tecnología me envía un mensaje.
¨Imagina la mística evolución que tuve con ustedes: Antes yo solo como en una isla; obviamente buscando ser feliz hasta que llegó tu mamá. Decidimos formar un hogar como había sido mi sueño desde niño y tener mis hijos. Nada raro hasta ahí porque eso es lo ‘normal’. Luego vinieron ustedes dos y mi vida tuvo otro motivo para luchar y hacer junto a tu mamá que esos niños fueran buenos y así útiles a los demás. Lo logramos y ahora pasamos a refundirnos en una entelequia que nos nutre. De esa comunión brota el amor que solidariza nuestras almas. ¿Quién puede ganarnos, entonces?¨
(Yo, solo esperando poder estar a la altura)
Te amo papá.